Son más de 63.000 estudiantes matriculados en el curso 2018/2019, con una gran mayoría femenina. Superan los 50 años y tienen mucha inquietud, por aprender lo que no pudieron aprender en su momento o por adquirir nuevos conocimientos, complementarios a los que en su día les llevaron por primera vez a las aulas universitarias.

Son los alumnos de los Programas Universitarios para Mayores (PUM), que actualmente se pueden encontrar en la mayoría de las universidades. Se calcula que dentro de medio siglo el 29% de los ciudadanos españoles tendrá más de 65 años. Por eso, Esther Sitges Maciá, de la Universidad Miguel Hernández, analiza los beneficios de volver a clase, tanto para el cuerpo como para la mente de los adultos de más edad.

Como bien expresa el cliché, nunca es tarde para aprender algo nuevo.

Saludos.