Uno de los objetivos fundacionales de The Conversation es “contribuir a un mejor conocimiento de los grandes asuntos contemporáneos y de las cuestiones complejas”. Como parte del escaparate de lo que se investiga y se reflexiona en las universidades y centros de investigación, no hemos eludido asuntos delicados, como la eutanasia o la gestación subrogada.

Hoy es el turno de uno de los asuntos más preocupantes y silenciados de la sociedad contemporánea: el sucidio.

Cristina Blanco Fernández de Valderrama, profesora de Sociología de la Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea lo analiza desde varios puntos de vista: estadístico, conceptual, psicológico.

De los datos que recoge, solo adelantamos uno, escalofriante: en España el suicidio es la principal causa de muerte por factores externos, muy por encima de cualquier otra, incluidos los accidentes de tráfico, a los que casi duplica.

El paro y la precariedad, a los que podríamos vernos abocados como consecuencia de la automatización del trabajo y la inteligencia artificial, podrían conllevar, también, un panorama de desmembramiento social y psicológico como el que se produjo en el pueblecito austriaco de Marienthal tras el crac del 29 y la Gran Depresión.

Como recuerda Xavier Tornafoch Yuste, de la Universitat de Vic – Universitat Central de Catalunya, los obreros de Marienthal, en vez de apoyarse en la ayuda mutua, se volvieron insolidarios e individualistas.

Después llegaron el fascismo y la Segunda Guerra Mundial.

Pero no todo frente a nosotros es gris. Aunque las poblaciones mundiales de grandes buitres se han visto reducidas en un 90% en las últimas décadas, el alimoche canario, que estuvo al borde de la extinción, se está recuperando.

José Antonio Donázar, del Departamento de Biología de la Conservación de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC) firma esta pequeña historia que aúna ciencia y gestión, y de la que es protagonista el buitre que surca los cielos del archipiélago canario.

Y este jueves es el día de Pi, un número que ni es algebraico ni racional pero, según el matemático de la Universidad Complutense de Madrid José-Manuel Rey, ayuda a ganar apuestas.

Salud,