Buenos días:
El cuerpo humano es una maravilla biológica, con células que nos defienden de patógenos extraños, sistemas que bombean y conducen los nutrientes y el oxígeno a cada una de nuestras células… Pero nada es comparable a la belleza y la complejidad extraordinarias del cerebro, el órgano que controla todos los demás y nos define como seres humanos.
Estas palabras de Rafael Luján, catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha y estudioso de las células nerviosas del cerebro, nos sirven para presentar la serie de artículos que publicamos con motivo del Día Mundial del Cerebro.
El artículo de Luján, que expone los últimos descubrimientos sobre el cerebro humano, va acompañado por otras diversas aproximaciones a ese fascinante órgano:
Sus compañeros del Área de Anatomía y Embriología Humana de la UCLM Alino Martínez Marcos, Alicia Flores Cuadrado, Daniel Saiz Sánchez, Isabel Úbeda Bañón, Melania González Rodríguez, Sandra Villar Conde y Verónica Astillero López tratan de hacernos entender la complejidad estructural de las conexiones neuronales del cerebro y su actividad
cambiante: el conectoma, las reglas de ese kilo y medio de tejido poblado de neuronas que nos dice quiénes somos.
Raquel Abalo Delgado y José Antonio Uranga, de la Universidad Rey Juan Carlos, se fijan en unas neuronas que no residen en el cerebro, sino en las tripas, las que forman el sistema nervioso entérico.
Javier Bernácer y José Ignacio Murillo, de la Universidad de Navarra, reflexionan sobre el estudio interdisciplinar del cerebro, especialmente en relación con la ética, la filosofía y la psicología.
Mª Dolores Estévez González, catedrática de Pediatría de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, se fija en los factores genéticos y ambientales de las enfermedades mentales, íntimamente relacionadas con el cerebro.
Ángeles Peinado, Santos Blanco Ruiz y Raquel Hernandez Cobo, profesores de la Universidad de Jaén, centran nuestra atención en cómo el cerebro afronta el envejecimiento.
Y su compañero Francisco José Esteban Ruiz expone que lo que hace diferente y singular el cerebro humano respecto al de los demás animales no es tanto su tamaño -el coeficiente de encefalización- como la plasticidad neural, es decir, la capacidad del cerebro para adaptarse y remodelarse en respuesta a los cambios.
Solo cuando sepamos cómo es y cómo funciona el cerebro entenderemos cómo surgen enfermedades como el alzhéimer, el párkinson, la esquizofrenia o la depresión. Por suerte, según el profesor Luján, parece que ese día está cada vez más cerca.
(Además, Eszter Wirth, de la Universidad Pontificia Comillas, y Rubén Garrido-Yserte, de la Universidad de Alcalá, escriben sobre el acuerdo de reconstrucción de la Unión Europea).
Salud,
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