¿No aparecen imágenes? Versión web ![]() Nuestra vida desde Jesse y CélineFeliz viernes, soy Claudia Lorenzo Rubiera, editora de Cultura. Una semana más vuelve a su bandeja de entrada Suplemento cultural. Mi madre me llevó en 1995, hace 30 años, a los Minicines de Oviedo a ver Antes del amanecer. Yo tenía 9 años y me pareció un castañazo épico. “No se callaban”, le eché en cara cuando salimos. No tardé mucho, probablemente un lustro, en reconciliarme con la película y rendirme al encanto de la historia de amor de Jesse y Céline, trenzada a base de conversaciones. ![]() Esta semana, tras editar el estupendo artículo de Celestino Deleyto y Marimar Azcona, volví a revisitarla y me quedé atrapada en un comentario que hace Jesse en los primeros minutos de la película. Cuando Céline le pregunta qué tal le está yendo en ese viaje a través de Europa en el que está inmerso, dice algo como que ha sido un asco pero que “estar sentado en un tren mirando por la ventana durante dos semanas le ha dado para pensar ideas que no se le hubiesen ocurrido de otra forma”. Esa frase me produjo escalofríos porque primero pensé “¿hace cuánto que no viajo en tren durante horas solo mirando por la ventana?” y eso me llevó al segundo razonamiento: “¿cuántas cosas interesantes no estoy pensando porque no le estoy dejando espacio al cerebro?” De repente, Antes del amanecer, un relato precioso que idealizaba el enamoramiento joven, la magia de la conexión y el encanto de una vieja ciudad europea, se revelaba como una narración, hoy en día, mucho más cercana a la ciencia ficción que, por ejemplo, el Minority Report de Steven Spielberg. Cómo ha cambiado el mundo… a pesar de que los seres humanos seguimos siendo los mismos. To ChatGPT or not to ChatGPT? El filósofo germano-coreano Byung-Chul Han ha sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades. Su figura enciende debates entre quienes aprecian su cercanía a la gente y su claridad expositiva y aquellos que creen que, en esencia, utiliza pocas palabras para decir… también poco. Jesús Zamora Bonilla es uno de los críticos con el personaje, un punto de vista que expuso en un artículo académico. Cuando le propusimos sintetizar sus tesis en The Conversation hizo algo poco ortodoxo y muy macarra que ha acabado resultando ser desternillante: le preguntó a ChatGPT cuáles son las principales críticas que se le hacen a Han. Cuando vio que la respuesta era, prácticamente, la misma que la suya y que estaba bien argumentada decidió mantener el texto hecho por la inteligencia artificial alegando que si el filósofo no hacía más que meterse con la IA, la IA debía tener derecho de réplica. El artículo coincidió en el tiempo con otro, de Ronald Forero-Álvarez, en el que el investigador debatía si, al utilizar a ChatGPT para escribir un libro, la autoría debía compartirse entre el ideólogo y la máquina, y se preguntaba quién tenía que rendir cuentas en esos casos: el humano o la tecnología. En nuestro caso podemos decir que Zamora Bonilla es el responsable de su texto y que no le hemos pedido a ChatGPT que rellene una ficha de autor. Merece la pena leer ambos artículos, tan lejanos a la Viena de Antes del amanecer, y plantearse preguntas exclusivas del mundo de hoy. Peter Hujar y la primera imagen del Orgullo ![]() Hace unos años leí un libro titulado Los optimistas, escrito por Rebecca Makkai, que narraba los primeros tiempos del sida en Estados Unidos (en concreto, en Chicago). La cubierta del libro era la foto (que está sobre estas líneas) de unos jóvenes que parecían manifestarse en medio de la calle de una ciudad. Sonreían, por lo que imaginé que iba acorde con el optimismo del título. Después supe, gracias a Arte compacto y su imprescindible pódcast sobre la historia del arte, que la foto era obra de Peter Hujar. Y finalmente Noemí Díaz Rodríguez escribió un estupendo artículo sobre esta imagen, creada para ilustrar el cartel que buscaba reclutar a gente para unirse a la que se convertiría, en 1970, en la primera marcha del Orgullo celebrada en Nueva York. Cajón desastreDespués del susto que nos dio a finales de 2024, Raphael retoma su gira española la semana que viene. Estrella Fernández-Jiménez explica por qué, si cerramos los ojos y pensamos en el cantante, además de verle entonar seremos capaces de recrear en nuestra mente unos gestos que son solo suyos y que ha ido trabajando a lo largo de su carrera. No tuvo una acogida tan popular, pero unos años después de Shakespeare enamorado se estrenó una película titulada Belleza prohibida, que narraba la revolución que supuso en el teatro inglés que las mujeres pudiesen volver a subirse a los escenarios. Y esa época describe precisamente Laura Martínez García en su artículo, centrándose en lo revolucionario que fue que, de repente, en una sociedad tremendamente segregada, las actrices y dramaturgas pudiesen ocupar el espacio público. Y para acabar cerrando el círculo, volvamos a los 90. Entre mi visita a los Minicines y este 20 de junio la comedia en España ha pasado de venderse en formatos como No te rías que es peor a promocionar los monólogos de Ignatius Farray o, hablando de ocupar el espacio público, a lanzar late nights presentados por mujeres como Henar Álvarez. Si eso ha pasado en 30 años, ¡qué no habrá pasado en 120! De recopilar, documentar y analizar la historia del humor oral en España desde principios del siglo XXI se encargará a partir de ahora Humcor, el primer archivo digital dedicado a esta especialidad en el país. Doina Repede, su directora, aprovecha para explicar cómo hemos cambiado en esto de reírnos. Feliz fin de semana, Claudia Lorenzo Rubiera, editora de Cultura ![]() La genialidad de Raphael se encuentra tanto en su voz como en su gestualidad. ![]() En el siglo XVII un cambio en la normativa del teatro inglés le abrió las puertas de los escenarios a las mujeres, haciendo que pudiesen formar parte del espacio público. ![]() Al hilo del nacimiento de Humcor, el primer archivo digital del humor oral español, repasamos la evolución de la risa en España. |