Buenos días:

Como cada 8 de junio, hoy se celebra el Día Mundial de los Océanos. Entre otras muchas funciones, estas vastas reservas de agua salada sirven de hogar a gran parte de la biodiversidad de nuestro planeta, incluyendo tanto a algunos de los seres más pequeños como a grandes animales como tortugas, delfines, ballenas y focas. Todos ellos se enfrentan a diferentes amenazas derivadas de actividades humanas, como el cambio climático, la pesca, el tráfico marítimo y la contaminación por plásticos.

En vista de esta situación, las Naciones Unidas establecieron en el Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal el objetivo de proteger el 30% de los océanos de aquí a 2030 para preservar su riqueza natural. Sin embargo, según los resultados de un estudio recién publicado, esta cifra no es suficiente.

En el artículo que abre este resumen semanal, el investigador de la Universidad Nacional de Educación a Distancia Jorge P. Rodríguez, uno de los firmantes del citado trabajo, nos explica cómo han logrado desarrollar la mayor base de datos de movimientos de grandes animales marinos. Analizando la actividad de más de un centenar de especies, han llegado a la conclusion de que la meta del 30% no permitiría abarcar sus principales áreas de residencia y migración.

Por eso, el autor y sus colaboradores proponen algunas medidas adicionales para mitigar las amenazas. Además, Rodríguez resalta la importancia de la cooperación internacional, “ya que los animales no entienden de fronteras”. Un asunto crucial que esperemos se aborde durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos que se celebra la próxima semana en Niza (Francia).

Salud,