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Si tiene la sensación de que en los últimos años han aumentado las noticias sobre violencia sexual en adolescentes, no se equivoca. Los últimos datos en España muestran un incremento de este tipo de agresiones, o al menos en el número de denuncias. Concretamente, de las 18 731 denuncias interpuestas en el año 2022 por este motivo, 8 337 (aproximadamente el 44,5 %) tenían como víctima a una persona menor de edad.

Las cifras contenidas en el informe Delitos contra la libertad sexual del Ministerio de Interior revelan, además, un destacado componente de género: el 82% de las afectadas eran niñas o adolescentes y en el 97 % de los casos, el agresor fue un hombre.

Tanto en adultos como en jóvenes, “ser mujer se configura como un factor de riesgo para sufrir una victimización sexual de cualquier índole”, asegura la profesora de la Universidad Internacional de Valencia Nathalie Soriano Ruiz, que analiza el panorama de la violencia sexual en adolescentes en España en el artículo que abre este resumen de la semana que termina.

La autora describe también el perfil de las víctimas y los victimarios de las agresiones sexuales en grupo y describe las causas que favorecen este tipo de comportamientos. A pesar de que este tipo de delitos cometidos por dos o más menores han aumentado desde 2016, su número continúa siendo residual respecto a los individuales.

Además de intervenir una vez detectada la violencia, es fundamental fomentar las medidas de prevención, proporcionando a los y las adolescentes una formación afectivo-sexual de calidad, adaptada a sus edades y estructuradas en torno al consentimiento, la igualdad y la no violencia.

Salud,